Localizado entre las calles Rollo y Sacramento, encontramos el Jardín del Palacio de O’Reilly, popularmente conocido como «Huerto de las Monjas».
Este escondido jardín formaba parte de un convento, dañado parcialmente durante la Guerra Civil, fue reconstruido y utilizado hasta 1972, cuando el lugar se dispuso para la construcción de viviendas, salvándose solamente la iglesia, que fue adquirida por el Ministerio de Defensa. El lugar, de evocadora atmósfera, estaba destinado en su momento para el cultivo de verduras, hortalizas y árboles frutales por las hermanas Bernardas (siglo XVII).

Uno de los muros que separan el huerto con el exterior, da hacia la Plaza de la Cruz Verde, donde encontramos la Fuente de Diana Cazadora.
Dentro del jardín, nos encontramos con la llamada Fuente de la Priora, compuesta por 4 querubines de bronce.

Esta huerta, transformada en jardín, formaba parte del conjunto del Convento del Santísimo Sacramento. Este convento, cuya fachada podemos observar aún hoy en día desde la calle Mayor, fue fundado en 1615 sobre unas casas anejas al palacio del duque de Uceda, valido de Felipe III.

El Duque fue el que trajo a unas religiosas del convento de Santa Ana de Valladolid para este nuevo lugar. El templo religioso es una magnífica muestra del barroco madrileño.
Esta es la maravilla de Madrid, donde conviven lo moderno con lo antiguo y podemos encontrar rincones mágicos de manera totalmente inesperada.
Se puede visitar el jardín entre las 6:00 y las 23:00 de lunes a viernes. Los fines de semana está cerrado.
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